Seguro que todo el mundo sabe lo difícil que es a veces mantener a raya el presupuesto doméstico mensual y anual. Los gastos imprevistos surgen como conejos de una chistera, y a veces simplemente es complicado afrontarlos sin ayuda externa. Esta situación es más dura aún, e incluso irritante, cuando aparece en el horizonte una ocasión irrepetible de comprar algo excepcional a un precio irrisorio, pero justo en ese momento no te queda ni un duro o estás ahorrando para unas necesidades más exigentes e importantes. ¿Hay alguna salida en esa situación?
Las necesidades son importantes, pero no lo más importante
Un ejemplo de acontecimientos que pueden suceder en cualquier momento del día son las ofertas de último minuto de las agencias de viajes. Todo el mundo querría irse de vacaciones, es un hecho. Seguro que tu pareja y los críos querrían salir a algún lado especial. Lo normal es que estéis ya hasta arriba de ir siempre al pueblo o a la misma casa rural. Mejor estaríais en una playa del Caribe o en las Maldivas.
A más de uno le gustaría cambiar esa situación. Sin embargo, los viajes ideales cuestan un ojo de la cara. Las vacaciones de ensueño para toda la familia en destinos calurosos para toda la familia, contando lo que cuestan los vuelos y la pensión completa, pueden alcanzar sumas de hasta cuatro cifras. Se trata de un gasto enorme.
Por eso no es de extrañar que todo el mundo esté pendiente de las ofertas last minute en los periodos clave, para que no se escape ni una oferta irrechazable. ¡Y a veces se encuentran! Por desgracia, suelen aparecer en momentos inesperados.
¿Cómo son las ofertas de último minuto?
Las ofertas de último minuto son plazas de una agencia de viajes que, por diversos motivos, no se hayan completado. Quizás alguien renunciara a su plaza, no pagara el adelanto, etc. El operador turístico prefiere venderla en el último minuto a bajo coste y seguir ganando un mínimo de dinero que dejar la plaza al precio original, ya que lo más probable es que nadie la acabe comprando.
Por desgracia para los cazadores de ofertas, aparecen muy rápido y desaparecen con la misma rapidez. Por eso la decisión de comprarlas debe ser inmediata. No hay tiempo para dudar, ya que hay muchos interesados y la oferta suele ser muy atractiva. De hecho, a menudo hay rebajas de hasta el 75 %.
¿Cómo resolver este problema?
En situaciones en las que hay que tomar una decisión de compra rápida pero no tienes suficiente efectivo para pagar el viaje, lo mejor es pedir un préstamo rápido.
Los préstamos online a plazos permiten obtener fondos en unos pocos minutos, así que te llegarán a tu cuenta a tiempo para comprar el viaje. Los intereses de estos préstamos no difieren en absoluto de un crédito bancario típico.
Además, recuerda que aunque fueran algo mayores, los beneficios son superiores, ya que gracias al dinero obtenido con este tipo de préstamos podrás comprarte, por un precio muy atractivo, unas vacaciones inolvidables. De cualquier forma, vas a destinar cierto dinero a las vacaciones, pero gracias a las empresas que adjudican préstamos rápidos puedes aprovechar las mejores ocasiones. Es un préstamo que se puede pedir en cualquier momento y soluciona al instante los problemas económicos que te hayan surgido.