El mercado laboral de hoy en día se caracteriza por un gran dinamismo. Los tiempos en los que se trabajaba en la misma empresa toda la vida han quedado atrás y no volverán. En la actualidad, los trabajadores han de ser flexibles y adaptarse rápidamente a las condiciones cambiantes. Ahora, mucha gente se ve abocada a dejar su trabajo anterior y encontrar su sitio en un entorno totalmente nuevo. ¿Cómo podemos cambiar de sector? ¿Es mejor hacer una carrera universitaria o cursos? En este artículo analizamos a fondo ambas opciones.
Carrera
La educación universitaria tiene sus ventajas e inconvenientes, que intentaremos presentar de la forma más honesta posible para que puedas valorar si es tu mejor opción. Al acabar la carrera, consigues una licenciatura o un máster –en función del nivel–, un requisito muy común en la mayoría de las empresas. El mayor inconveniente de empezar una carrera universitaria es su duración, ya que por lo menos tienes que echar 3 años. Otra cuestión es conseguir plaza en la carrera que quieres. En muchas licenciaturas requieren una nota de corte bastante alta en la selectividad. Para quienes hayáis aprobado la selectividad hace muchos años o ni siquiera la hayáis hecho, la idea de tener que repetirla puede asustar, pero no os desaniméis. Hay otras opciones, como las carreras de la UNED, cuyos requisitos son bastante menores y se pueden realizar a distancia. Por lo tanto, podréis compaginar vuestro trabajo con los estudios, ya que las pocas clases presenciales que hay se imparten en horarios accesibles. En cuanto a la matrícula, si en un momento dado no cuentas con los fondos necesarios y no puedes optar a ninguna beca, los préstamos rápidos online te ofrecen una liquidez inmediata para abonar el importe requerido.
Resumiendo: una carrera universitaria es una buena opción para quien esté decidido a cambiar de sector, no le importe pasar por un periodo de aprendizaje largo y pueda compaginar el trabajo y los estudios durante un tiempo prolongado sin sufrir estrés.
Cursos
Al contrario que las carreras, los cursos se caracterizan por una duración variable, ya que pueden extenderse durante meses o años. Su principal ventaja es que, al completar un curso, aunque solo haya durado dos meses, conseguirás un certificado de competencias. Esto puede ayudarte a desarrollar rápidamente tu nueva carrera profesional. Los cursos también suelen dividirse en niveles. Por lo tanto, después de finalizar un curso de primer nivel, ya podrás encontrar trabajo en una profesión determinada, y mientras tanto seguir capacitándote. Los cursos suelen ser de pago, aunque si estás en paro y apuntas al INEM puedes acceder a ciertas capacitaciones gratuitas. Los préstamos rápidos online también son una buena opción para obtener financiación para tu educación. No requieren ninguna capacidad crediticia, que suele ser una restricción importante para las personas que necesitan un préstamo. Por lo general, los cursos tienen un valor práctico mayor que las carreras universitarias.
En resumen, los cursos son una buena solución para las personas que quieran iniciar su nueva carrera profesional más rápido. También serán de gran utilidad para las personas que ya tengan diplomas universitarios y quieran adquirir habilidades adicionales.
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